tras un telón de austeridad
se esconde el dios más sublime
arde la mano que esconde,

se tensa el puño que oprime

persiste la oscura mirada
de ovejas que están hambrientas
de focos que dejan ciego
y de pájaros que muertos vuelan

quien fuera objeto de admiración
hace tiempo que dejó de serlo
alas viejas en viejo búho
quieto a la espera el viejo perro

de una orquesta de arcángeles perdidos
están llorando los violines negros
se prepara para engordar gusanos
el semblante frío de un viejo enfermo

aliento de muerto, pero aún vivo
impaciente está la Flaca esperando
las manos temblando, el pecho vació
el rostro cansado, los ojos dormidos

se mancha el cielo de rojo,
se espesa la fina niebla
se oye un silencio de muerte
se rompe una fina cuerda

con su último suspiro
me dedica su mirada
y me agradece sonriendo
que fuera yo quien lo matara

01/11/09, 00:30
Muerte al maestro
Murcia, Miercoles, 19 de agosto 1:48

hoy te quiero susurrar
los mil versos nunca escritos,
prófugos de tu mirar
que nunca dije
y hoy te digo

anoche me vistió una canción al andar
me perdí entre mis dudas y el alquitrán
no te encontré
y en lo alto de aquel puente vomité el amor
junto a una botella amarga de cualquier licor
tan borracho de penas
y tan sobrio de alcohol

Murcia, Agosto 08

hoy el invierno me tiene encerrado
viene a por mí, lo sé y lo comprendo
porque él desnuda los bosques frondosos
y yo desnudo a la noche su cuerpo

Murcia, 26/04/09

La piedra

La piedra clavada en el camino
sabe los secretos que tan bien guardamos
Secretos negros de blancos castillos
y de mustias paredes que adornan olvidos

Sabe y no finge la estrecha cuartada
que ángeles muertos cayeron rendidos
Y que juntos hacen la lúcida estampa
que explica la muerte y su dulce sentido

Sabes que siempre el olvido engaña
y alimenta el reflejo virgen de alas
Reflejo que nunca fue tan dañino
y siempre refleja mil luces del alba

No quiebres el paso del tiempo
ni siembres la viña del odio y la espada
La primavera llora por caminos muertos
huye escondida entre selva y montaña

Vacía y triste la lúgubre fuente
muere por ver el sol en la mañana
Y en la noche fría la primavera duerme
por cálidos cuentos de hadas
y dulces cantos de duendes

Murcia 15/09/08

busqué un ruido delator
algo que me distrajera
busqué mi alma en un rincón
y no te hallé, compañera
fue la garra solitaria
que se me aferraba, clavo ardiendo
y fue un dulce testimonio
fue un testimonio de que te quiero

Londres, 8/04/08